martes, 26 de diciembre de 2006

Alguien olvidó decirme

Alguien olvidó decirme

Ahora que El viento desgarra mi cuerpo
partiéndolo en pequeños trozos,
pedazos de mi sin vida...

Ahora, que la lluvia cae sobre mi cuerpo desnudo
como puñales filosos abriendo heridas profundas
en toda mi piel...

Ahora que mi mundo se desmorona
y la nada se apodera de mi alma,
devorando todo mi ser cómo cáncer maligno

Ahora; justo ahora me doy cuenta
que alguien olvidó decirme que el amor,
el amor duele.

Autor: Pedro Ortiz Fernández

miércoles, 13 de diciembre de 2006

De tus letras a la pasión.

De tus letras a la pasión.

De tus letras a tu voz,
De tu cintura a tus labios,
De tu espalda al tus pechos,
De los pies a la cabeza.

Del amor efímero,
A la pasión que me despiertas,
De la mujer que me provoca,
A tus pensamientos que encienden mi pasión.

De tu piel a tu alma entera,
De tus pensamientos a tus letras,
De lo imaginario a lo escrito,
De tu monte de Venus a tu rió.

De tus labios al fluido de tu amor,
De arriba abajo,
De subir y bajar,
De caricias y de besos,

De tu cuerpo al mío,
De nuestros placeres a las letras,
De lo erótico a los hechos,
De tus letras a nuestra piel.

Del espíritu de nuestras letras,
A la liberación de los instintos,
De la extensión de tu cuerpo,
A la conexión de nuestros sentidos.

De tu cuerpo al mío,
Que sin siquiera tocarlos ya se conocen,
Se disfrutan y se acoplan,
Se complementan y se funden.


Autor: Pedro Ortiz Fernández

¿Que si te amo?

¿Que si te amo?

­¿Que si te amo? Me preguntas cuando estoy viendo tus ojos...
me desconciertas con tus preguntas es muy cierto...
por que yo aprendí amarte desde las sombras...
y a besarte con mi silencio...­­

¿Que si te amo? Me preguntas cuando te tomo entre mis brazos...
me haces caer en un abismo de desconfianza...
por que a veces soy yo el que duda...
por esa mirada que se pierde en la distancia...

¿Que si te amo? Me preguntas, que no sientes el palpitar en mi pecho...
esos latidos que me arrancas al sentir que estás conmigo,
y sentirme dueño tus besos.
esos besos que me hacen estremecer,
que me han hecho pecar cuando gozo de ellos.

¿Que si te amo? Yo te amo más que aquel niño a su juguete...
sin exigirte nada a cambio solo amor,
como es posible que no sientas las lágrimas que he derramado...
al sentir que soy tan tuyo...
al tocar el mismo fuego cuando estalla mi pasión...

¿Que si te amo? Y todavía lo preguntas...
si yo escucho a través de tus oídos...
si yo soy fiel como aquel perro con su amo...
Tu eres el aire si me pides que respire...
Si yo soy agua cuando me dices que sientes sed...

No me preguntes entonces mi vida si te amo.
por que no sabré ya que responder.
Por que cada vez que estoy entre tu cuerpo
cada vez que siento tu respiración, es un segundo que de mi vida estás matando,
para hacer de mi un zombi que solo vive por tu amor.

Aun cuando presiento que estas dentro de mi cama,
y tu mirada vaga en un rincón buscando tal vez otros horizontes.
Dejando en ella los ríos de tu pasión,
diciéndome que me amas.

Esperando ser amada por otro que no soy yo. Aun así te digo que te amo.
te amo por las miles de caricias que brotan de tu cuerpo,
por los caudales que emanaron de tus entrañas
al decirme no así ya no que me haces adicta a Ti y a tu forma de hacerme el amor.
por los celos que despiertas en mi cuando te dejo.

Por que siento que te quiero cada día que no te tengo,
por que haces que dude del amor que nos tenemos,
al preguntarme a diario si aún te sigo amando o te deje de amar.
Que si te amo preguntas?

Autor: Pedro Ortiz Fernández

Te pregunte

Te pregunte

Te pregunté una vez con la mirada,
Y tu reacción fue cálida y coqueta,
así me afirmabas lo que a lo lejos se veía;
que me querías y que me amabas.

Te pregunté una vez con una caricia suave,
pero burda como mis manos al tacto de tu hombro,
seguido de un abrazo y
me lo devolviste todo diciéndome te amo.

Te pregunté una vez con un beso,
que gozoso yo al roce de tus labios tomaba ventaja
y que con un roce de tu piel enloquecía.

Poco a poco y para siempre tu amor entro a mi vida,
desgarrándome el alma y tomándome en la tuya.
Sacándome de esta soledad que yo tenia,
yo siempre buscaba la palabra adecuadas,
cuando tú, con una caricia y un te quiero lo lograbas.

Acariciaste mi corazón y lo sanaste,
le demostraste que se podía amar.
Que el amor era paciente sereno y tierno.
Y sin dejar de ser tú, me enseñaste algo desconocido,
que a tú forma y con tus caricias verdaderamente me amabas.

Autor: Pedro Ortiz Fernández

Mis ojos se secaron

Mis ojos se secaron

No he de llorar,
Ya que las lagrimas en mi se secaron,
Fueron lágrimas que a su salida lastimaron,
Pero la vida me dio en el amor otra Oportunidad

No he de llorar,
Ya que hoy tengo ganas de amarte tanto,
Que aún con el alma herida tratare de robarte una sonrisa
Que mitigue el dolor que te he causado.

Autor: Pedro Ortiz Fernández

¿Y el amor que brindabas?

¿Y el amor que brindabas?

¿Dónde esta el loco amor que me brindabas?
Ahí dentro de ti o aquí afuera cerca de mi.
¿Donde se han fraguado las arteras
y múltiples ofensas a nuestro amor?

Ahí dentro de ti o aquí afuera cerca de mi.
Regálame y toma para ti misma, un poquito,
Un poquito de locura, Que no hace mal amar,
después de haberse hecho tanto daño.

¿Se te apago la luz o la encontraste?
¿Se te zafo un tornillo o lo apretaste?
¿Cual es la dimensión de la locura y tu pasión?
Si en aquellos días simplemente juraste amor
y ni tu misma, de el te sostenías.

Te agarraste de una falsedad que te calaba.
Al primer tropiezo que tuviste te desvaneciste.
Has hecho mucho daño, tu egoísmo,
tu sarcasmo son tu kabbalah.

Pero afortunada aun,
ya que sin darte cuenta te salvaste,
de todas las cosas bellas que dejaste.

Creo que no era buena la madera.
Sin embargo, quise hacer de ella
una obra de arte con amor ternura y paciencia.

Pero creo que era mucho pedirle a mi locura
que se compaginara con al tuya.
Demasiadas mentiras, rencores y desdichas
que en ti arrastras, y no te dejas mitigar ese dolor que ya te cala.

Sin decir palabra alguna,
como una loca acciones has tomado
de despecho y desamor te han llenado
y hasta una cría te ha dejado.

No malgastes ya tu vida,
mira…mira atrás lo que has dejado,
que ya no son momentos de reclamo, ni de reconciliación,
simplemente deja libre lo que no amaste
y prepárate para la vida nueva.

Ya que en un tiempo me mentiste
y a mi llegaste con amor, ilusiones
y extraños bagajes.

Aun así creí en ti,
en el amor que me brindabas.
Pero como cada día amanece,
y trae con el un nuevo brillo de luz
y de energía a mi vida le pregunto:

¿Que fué, de aquella chica oportunista
y el amor que brindaba?

Autor: Pedro Ortiz Fernández

En tu espacio

En tu espacio

Te deje libre en el espacio de tu amor
Y a tu regreso simplemente me dejaste
Se que nada es eterno pero que efímero fue.

Llegaste apenas hace unos meses a mi vida,
A amar de nuevo me enseñaste,
Sin darte cuenta de lo que hacías.

Para mí ya no era fácil amar,
Lo puse en el cajón de mis recuerdos
Pero tus ojos traviesos lo encontraron

Mi vulnerable corazón se desangra de nuevo,
Es muy entupido ofrecer la libertad del ser,
Siempre queremos una atadura

De no ser por que tus labios se mostraron ávidos de amor
Se entregaron a los míos, que sin dejar de ser quien soy,
Te di de mi lo mejor, Tu LIBERTAD de amar y de cambiar

De ser una mujer que a mi lado se acoplara
Que se alimentara de mi amor, que aun, sintiéndolo tan poco
Lo acrecentaría el tiempo, pero no fue así…

Simplemente se quedo en el tiempo,
Como un sueño que duro muy poco.
Gracias por tus besos, tu amor y tu tiempo

Que a mi corazón buena falta le hacían
Hoy lo dejas libre nuevamente
Con ganas y ánimos para Amar.

Autor: Pedro Ortiz Fernández

Silencio...

Silencio...

¿Y tú,
Qué haces con tú silencio?
Si escuchas Tú silencio ya puedes vivir:
Es que en el mío, yo te respiro
Para poder sentir que aún sigo vivo!

Y si tu,
Aún en tú silencio,
También me respiras,
Es que no ha sanado aún la herida.

Déjame,
Déjame seguirte amando
Mantengamos el encanto de nuestro sublime Amor!
Seguirte amando, y dejar de ser de ti un trago amargo
Por el cual nos separamos.

Autor: Pedro Ortiz Fernández

¿Donde esta el Amor?

¿Donde esta el Amor?
Desde mi ventana y a lo lejos, veo en el horizonte como el sol se esconde.
Y es entonces cuando mi Corazón se estremece y me pregunta.
¿Dónde esta el Amor con el que me alimentas?
¿Dónde esta? Que el día termina y de nuevo no lo veo.
¿Es a caso que no lo ilumina el sol,
Si no la luz de la luna?
Desde mi ventana y a lo lejos, veo en el firmamento lleno de estrellas
Una gran luna llena de amor y de ternura.
Y es entonces cuando mi Corazón se estremece y me pregunta.
¿Dónde esta el Amor con el que me alimentas?
¿Dónde esta? Que la noche estrellada pronto terminara y no lo veo.
¿Es a caso, que ni el firmamento lleno de estrellas ni la luna lo alimentan?
Desde mi ventana y a lo lejos,
Como cada tarde veo al sol ponerse, Luego contemplo a la luna y las estrellas,
Para darle a mi corazón mis pensamientos, En los que en solo en Ti pienso.
Mi pequeña princesita, Mi encanto y mi desvelo,
Eres Tú mi pequeña niña por quien yo me muero,
Y ni al sol, ni a la luna y las estrellas ni a mi corazón se lo revelo.
Hija mía, razón de mis desvelos, tus eres por siempre, de mi gran amor el alimento.

Autor: Pedro Ortiz Fernández

De Letras y Palabras


Aquí el texto...De Letras y Palabras

He de decirte la verdad, en mi desesperación por haberte perdido, a las letras me he entregado, Fue simplemente por tenerlas cercanas a mí. Fue entonces que aprendí. Así como debía de haberlo hecho de ti, Son un romance, una delicia, Son algo así como una cadena de emociones y de amores, Que a la vida me regresan.

He logrado hacer de ellas un romance y una ilusión, Son mis confidentes, ellas saben de sobra Hasta donde se desborda mi pasión, Las he usado, las he trabajado, las abandono. Y de nuevo las tomo y siempre están ahí.

Dispuestas, fieles, audaces y enteras. Nunca están cansadas, Siempre me revelan mis verdades, Mis inseguridades y mis sentimientos. Mismos que he escondido en un ir y venir de emociones encontradas, en ellas he aprendido, que el amor solo como con ellas. Con prudencia, respeto, elegancia, sensibilidad y pasión.

En ellas he aprendido a decirme a mí mismo… Date cuenta donde te encuentras, ya son 4 décadas y 4 tantos más, con 2 Vidas a mi lado, la pasión y la ternura. La alegría y la tristeza. Las emociones y el llanto, la risa y el coraje; Lo más hermoso de todo es que Dios y Tu a mis hijos me han dado.

Son como las letras… Están en constante cambio, son altas y bajas, Con puntos y comas. Y donde más les gusta hacen una pausa, Solo para hacerlo más extenso ese momento. Son como las letras… Siempre tienen algo nuevo que dar, Algo nuevo que escribir y que decir de su estilo... Siempre a activo y definido, son niños, son mis hijos y son parte de ti que eres bella, sensual y atrevida.

Vivo desde hace mucho tiempo queriendo escribirle esto a mi propia vida.
En ti siempre encontré lo que hoy admiro. Eres un abecedario, una armonía mal interpretada. Eres para Mí, El arte de un libro erótico en altas y bajas…

Un libro que se quedó sin escribir… Un libro que no se editó… Simplemente llegaste a mí y te quedaste como un abecedario y millones de palabras, para decirme a mí mismo…Ahí están las letras construye las palabras.

Autor: Pedro Ortiz Fernández